Su procedimiento es fácil: cada semana se emite una gala en directo donde los concursantes tendrán que hacer una actuación cada semana para demostrar que se tienen que salvar de la nominación del jurado. La misma contó con rayas con un tono más rojo que el base, un cuello rojo por fuera y blanco por dentro, el par de botones que le dieron un aspecto sabio y elegante a la piel del campeón, y las franjas blancas migraron de los hombros al costado bajo los brazos.
En el Campeonato Sudamericano 1963, Argentina, siendo dirigido por Horacio Torres, terminó tercero en el torneo, aunque el equipo alcanzó importantes victorias sobre Brasil, Ecuador y Colombia, pero perdió en Bolivia y Perú. Y aunque en los siguientes años no ganó la Copa América, siguió demostrando supremacía a nivel continental, pero no encontraba una adecuada organización interna como para plasmar ese potencial futbolístico en Copas del Mundo. Ese mismo año el equipo sufrió tres derrotas en Brasil: dos de ellas en la Copa Roca y la siguiente en la Copa Atlántica.
